En los últimos años un abogado excepcional se ha hecho famoso. Su memoria registra todo lo que percibe y lo reproduce fielmente, como si se tratara de una grabadora de video. Este procesa la información sin atajos mentales y ni siquiera se inmuta frente a la ira más explosiva.
Es codiciado por todos los bufetes legales. Factura más que cualquier abogado de Nueva York, tiene una capacidad de multitasking envidiable y puede responder cientos de preguntas en cuestión de segundos. Su nombre es Watson y es un sistema en la nube.